sábado, 12 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

¿A segunda vuelta?


Diez para aquellos niños que aparecen en el programa de "Todo el mundo cree que sabe", que quizá no son los grandes estudiantes con gran conocimiento de primaria, ni los futuros genios que México espera impaciente; pero tienen el mérito de dominar temas básicos en un país en el que la educación es un sector muy descuidado. Quizá las respuestas ya estén predispuestas y estudiadas por ellos, pero la imagen del niño inteligente puede servir como estímulo para sus contemporáneos.

Cinco para los "especialistas" con alguna profesión o en nivel superior, que van a demostrar la ignorancia que corroe la erosionada "erudición" recibida durante su rol de estudiante a través de su vida. Y es que no se molestaron en solidificar las enseñanzas aprendidas. Pero aún faltan dos boletas.

Cero para los responsables de este enorme hueco -o abismo-, las instituciones -en este caso, la S.E.P.- encargadas de inspeccionar que los temarios se cumplan de principio a fin y que los métodos de los maestros sean los adecuados, entre otras muchas deficiencias que provocan estos resultados.

A recursamiento directo la SNTE y ni qué decir de la maestra; que se regrese a kinder. El sindicato es el encargado de promover este programa; no puede atender correctamente los asuntos internos, pero busca camorra y dinero por doquier. Entre Hummers para cada líder y plantones, intentan promover una educación ejemplar con sus "comerciales" a la mitad del programa. Y lo que es peor, se jactan de defender "su" proyecto, alianza por la calidad de la educación, cuando es la SEP la encargada de su desarrollo; el SNTE, de vigilar el cumplimiento de los derechos de los maestros. Dando palmadas y clavando la estaca.

Regresando al contenido del programa, lo mejor de todo es ver a aquellos "eruditos" sosteniendo ante una camara, representando miles -si no millones- de personas observándola y escuchándola:
-Soy Escriba su nombre aquí , y un niño de primaria sabe más que yo. ¡Porque eso nos encanta, y no nos da pena! Si potencias mundiales como Japón se burlan de la gente con programas humillantes, ¿Por qué nosotros no, aunque sea un poquito?

Mención especial merece Marco Antonio Regil, conductor del programa, quien es un sujeto con carisma, además agrega comentarios graciosos atinados. En fin, a pesar de esos elementos, por algún factor extraño los programas basados en esta dinámica tiende a desaparecer, con excepción de "El rival más fuerte". Veremos cuánto tiempo soporta la presión del ranking, que ha destripado a más de uno.