miércoles, 30 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

Monopolio milenario


No encuentro el meollo del fundamento mediante el cual Francisco González y compañía se basan para afirmar en sus comerciales televisivos que son "El futuro del periodismo". ¿Se refieren acaso a la monopolización de los medios de comunicación masivos? Lo que comenzó como un mero proyecto de periódico se ha convertido en una red de información noticiaria a través de los Mass-media: Periódico local, periódico en distintos estados de la República, canal de televisión y una revista semanal con un chisguete de lo ocurrido en la semana.

¿El futuro del periodismo? No hay nada novedoso en lo que nos muestran. Ni siquiera la presencia de un desgastado Ciro Gómez Leyva, del cual medio México muestra afecto hacia su persona, pero sus constantes señalaciones (Jaime Avilés, periodista) y su relación con Carlos Ahumada, lo indican como un periodista con un letrero de "Se vende" en la frente. Pero esta no es una hogera, así que no quemaré a nadie más de la cuenta.

Vaya, creo que hay otros medios que se interesan más por su presencia en internet -a mi punto de vista, el verdadero futuro del periodismo-, insertando presentaciones flash o videos multimedia (es decir con un menú interactivo) en sus portales. Al menos, El Universal se preocupa más por ello, aunque en el aspecto de la redacción en sus textos de internet sean algo descuidados.

La revista proceso se ha encargado de presentar documentales impresos o reportajes ilustrados bastante interesantes; hace poco dí una hojeada al especial de narcotráfico, mucho más interesante que presentar en televisión un par de decapitaciones, que caen más en el morbo, que en la presentación de una cruda realidad.

La idea de un semanario de noticias parece más un intento desesperado de conseguir acaparar un mercado más amplio, que una forma de informar a la gente. Por inmediatez, cae en lo anticuado; por precio, creo que un periódico contiene mucha más información y quizá el precio no sea tan desigual. Su línea editorial... bueno, qué se puede esperar de un diario marca Televisa.

¿El futuro de la información es Milenio? Prefiero quedarme en el presente. Al menos con ese futuro malvislumbrado
martes, 29 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

¿Hago o soy hecho?


Todo lo que el hombre hace es cultura; por tanto, todo objeto ya modificado de su estado natural es un aspecto cultural: Cuando se trata de madera o metales transformados en muebles, es cultura artesanal; al convertir las telas sintéticas en ropa o adornos, es la cultura de la moda; cuando se forman figuras meramente decorativas, se llama arte; y podría continuar con un sinfín de aspectos naturales convertidos en cultura, pero sólo lo ejemplificaba.

Ello nos lleva a concebir un mundo totalmente cambiado, al menos en una zona urbana. Puede percibirse el mundo como algo que nosotros hemos hecho, pues de conservarlo tal cual, nos consideraríamos como una especie sin evolución, aún primitiva; nuestro instinto de comunicación ha logrado que el mundo sea tal cual hoy lo conocemos: donde los teléfonos celulares y el internet permiten una comunicación instantánea aún a miles de kilómetros de distancia. Y entre más moderno, mejor.

Este último punto es el que concierne al tema de este post: ¿Nosotros hacemos a las cosas, o las cosas nos hacen? ¿Somos el adorno de un Blackberry o de una Palm? ¿Nos reducimos a nada sin la iMac o sin la Vaio? ¿Nos colapsamos si nos ponen enfrente una máquina de escribir?

Muchas personas creen ser superiores por traer un traje Ermenegildo Zegna o ropa Louis Vuitton, cuando creen que ésa es su única cualidad: una cara bonita, un cuerpo bien formado o 9 mil pesos cargando sobre la piel.

Tampoco digo que sea malo tener una buena presentación de vez en cuando y en el momento en el que se necesita, utilizarlo. Lo criticable es no poseer características extra al momento de volverse innecesaro el aspecto físico; en las pasarelas o como modelo de una revista, evidentemente las cosas cambian.

Pero cuán triste resulta una vida en la que todo gire en torno a lo superficial, en el auto o vestido de moda, en las zapatillas más caras o los eventos más prestigiosos. O peor aún, a "viborear" a una persona, humillándola verbalmente sin que se dé cuenta.

Hablaba en un post anterior acerca del control, refiriéndome a las máquinas. Podría esta publicación tratar un tema parecido, pero relacionado a todas las cosas; la diferencia radica en que sí necesiitamos a las máquinas, lo que no necesitamos es el sentimiento de arrogancia que (las máquinas y cosas en general) nos hacen creer que tenemos. Entre más tengo, más se de cuánto carezco.
jueves, 24 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

Entretejiendo la pobreza


Es fácil culpar y exhumar cuando se está del lado del juez. Cuán sencillo resulta culpar a otros culpables (que lo son) sin delatar nuestra propia responsabilidad. La naturaleza y nuestros propios costumbres y valores así nos lo han impuesto: nacimos para criticar sin ser criticados, o al menos, no es de nuestro agrado vernos frente a nuestro reflejo, el único sujeto capaz de no engañarnos.

Dicen que el gobierno tiene la culpa de nuestra situación. Y la tiene. Pero es necesario no olvidar que en esa fechoría existen cómplices inconscientes de esta connivencia: muchos de nosotros. Al dar una mordida para evitar un trámite, al intentar salir de pobres buscando el premio grande de la lotería, al no participar activamente en la política mexicana porque estamos más atentos al superclásico del fútbol; lo demás puede esperar. Pero la pobreza ahí sigue. El hambre no espera.

La mayoría de las personas dicen que para mejorar la situación económica hay que acabar con la pobreza; y es como definir a Dios como “algo”. Otros, un poco más orientados, dicen que se debe distribuir de manera más equitativa la riqueza. Es tan sólo la punta del hilo arácnido, y yo no pretendo desenredar la telaraña.

El mercado informal es un problema de tantos que tenemos a causa de esta no equidad económica. No está documentado, basta cruzar cualquier avenida o calle principal, para darte cuenta de la gravedad del problema: niños, mujeres, ancianos y también hombres con edad para trabajar, en las esquinas esperando algún carro con el parabrisas sucio. O vendiendo golosinas, llaveros, discos piratas, o simplemente pidiendo dinero a cambio de una cara de angustia no fingida, pero sí con un exhibicionismo remarcado, en busca de la compasión de la gente que tenga una moneda “que no afecte en nuestra economía”.

Si, es cruel ver a estas personas ante tales condiciones de vida; pero es más cruel ser el sostén de estos “trabajos”, que genera más ingresos que un obrero u otra persona que perciba el salario mínimo como paga por sus jornadas de 8 horas o más, ante actividades sumamente desgastantes. ¿Cómo estamos manteniendo esos trabajos informales? Regalando una moneda a una indígena (para nada con connotación despectiva), o al muchacho de la franela que cuida nuestro carro.

¿Cómo solucionarlo? No es nada sencillo, si tomamos en cuenta que el mercado informal ha llegado a generar hasta 33% de la economía nacional. Esto es originado porque las oportunidades de empleo son escasas, la paga es paupérrima o no se les brinda por discriminación de tipo racial, sexual, física y un considerable etcétera. Los estereotipos han sido causales de nuestros más grandes errores, han transformado a un ratón en un monstruo y han alimentado a la pobreza por marginación de manera preocupante. Es obvio que cualquiera busca nuevos horizontes económicos, y los encuentran en los ya citados, además de otros como la prostitución, el robo y el narcotráfico.

La siguiente pregunta se refiere a cómo generar empleos para estas personas. Ello ya requiere la participación de los altos funcionarios: aprobar leyes para que las PyMES puedan crearse de manera más sencilla y sin trámites enredosos; esto permitirá a un pequeño o mediano empresario producir con mayor efectividad y prontitud, y así hacer crecer su empresa; a su vez, requerir un mayor número de empleados que cumpla con las expectativas de desarrollo y brindar esos huecos de empleo que sufrimos. Para que las empresas nacionales crezcan –y ahora sí, en lo único en lo que ha acertado el PRD en sus spots durante su campaña para las elecciones del 2009- es consumiendo productos nacionales; de nada sirve la proliferación del mercado nacional si como consumidores lo seguimos despreciando.

También considerar el trabajo del subordinado. No descartamos la importancia del gran empresario, emprendedor y con gran capacidad de liderazgo, pero no olvidemos que la fuerza de trabajo, la “mano de obra” hace funcionar a la empresa de igual manera, por lo que una retribución considerable mejorará el desempeño del trabajador y su relación con sus compañeros y jefes. La comisión Nacional de Salarios mínimos podrá establecer el doble del salario mínimo actual, así como reformar la Ley Federal del Trabajo y establecer un organismo que regule el pago efectivo del salario al trabajador, así como sus ingresos extra (vacaciones, indemnizaciones, horas extra, aguinaldo y otros) y verificar que cada empresa maneje todos estos parámetros en sus contratos.

Otro factor también le compete: la educación. Pero no se trata de construir una escuela primaria o secundaria y mostrar que eso es un ejemplo de apoyo a la educación, sino diseñar proyectos para que los estudiantes reciban capacitación que en un futuro les sea útil, y no los talleres que se imparten actualmente, que quizá en un año o dos olviden.

Obviamente, que de esas habilidades desarrolladas surjan oportunidades de empleo bien remuneradas: es cierto que una persona con licenciatura o doctorado debe recibir mayor cantidad de ingresos por su acervo cultural y gran conocimiento de su especialidad. Pero un barrendero, un electricista y otros empleos considerados inferiores de manera errónea, también deben recibir un salario considerable, pues son actividades pesadas físicamente.

Pero ello probablemente signifique un yate menos, un viaje a París cancelado, una mansión que tendrá que esperar. ¿Pero cómo me van a hacer eso a mí?, preguntaría el gran empresario. ¿Cómo le quiero quitar un pelo a un gato? Soy un desconsiderado, desalmado e inconsciente.

Si estos individuos decidieran no cumplirse sus “pequeños caprichos”, muchas personas estarían más interesadas en trabajar en alguna empresa, no importando la labor. Ya no estarían interesados en cuidar coches, limpiar parabrisas o vender playeras en los tianguis. Ello reactivaría gran parte del dinero al Producto Interno Bruto, al dejar la economía informal de lado. Generarían mayor cantidad de recursos gracias al pago de impuestos y, por ende, habría mayor presupuesto público; sin contar las inversiones de los pequeños y medianos nuevos empresarios.

Ojo. Esto, como lo dije al principio, no pretende desenredar la gran telaraña socioeconómica en la que nos vemos inmersos, simplemente pretendo mostrar utópicas soluciones en un panorama imaginario. Después de todo, no es un delito soñar; si así fuera, los pobres y los periodistas pagaríamos cadena perpetua.
martes, 22 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

¿Tener la razón, o ser feliz?


Parece un dilema tan fácil de resolver, y muchas veces nuestros propios prejuicios nos impiden solucionarlo de la mejor manera.

Vamos por la vida peleando con todo mundo, en muchas ocasiones sin importar el problema; el sentido es tener la razón, no perder alguna discusión, porque cada una representa una batalla. Una guerra psicológica en la que nos vemos inmersos diario, y en la que el ganador no obtiene un premio, no una recompensa sino aquel autoreconocimiento inútil -acaso el reconocimiento "extra" de otros oyentes-.

Se vuelve crítico cuando se busca un motivo para discutir, pues ese autoreconocimiento se convierte en un sentimiento necesario y el indivíduo se siente incompleto e inseguro si no se gana una discusión.

Ocurre con nuestra pareja amorosa, con nuestros amigos, con nuestros padres, con nuestros jefes... y no distinguimos el momento en el que una plática se transforma en una riña verbal, pero, ¿Qué pasa si damos nuestro brazo a torcer, si cedemos un poco para que termine la discusión y dar paso a un tema nuevo?

¿Vale la pena intentarlo? No hay mucho que perder, y en cambio, se pueden tener distintos beneficios; quizá ahorremos saliva, evitado un coraje, continuado una charla que quizá pudo esfumarse ante una pelea de palabras. Hasta podremos conservar una amistad que quizá se vea fracturada por una discusión absurda.

Pero hay un sentimiento que nos impide realizar esta sencilla práctica: nuestro orgullo. Esa vanalidad psicológica provoca tantos disturbios en las relaciones sociales, que debería ser erradicada; ello sólo se logra con la práctica, así que por mi parte ya inicié el entrenamiento. ¿Tener la razón o ser felíz? la báscula no miente.
lunes, 21 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

El cielo en la tierra: Oktoberfest


¿Me tacharían de exagerado aquellos hombres que no perciban la fiesta de Oktoberfest como un evento cercano a la gloria? Bueno, pues una imagen vale más que mil palabras, pero seguramente una visita valdrá más que mil imágenes.

Y es que es difícl resistirse a los atractivos que ofrece el evento: hermosas mujeres alemanas con Dirndls, litros y litros de cerveza en tarros, camaradería y desfiles de personas en trajes bávaros. Una zona en la cual la riqueza de su cultura embriaga de placer.

Baviera es un estado de Alemania, y su principal ciudad es Múnich (en alemán, Baviera es Bayern y Múnich se escribe Munchen, por lo que decir Bayern Munich al referirse al equipo de fútbol es incorrecto). De esa región provienen estos trajes, basados en la vestimenta de los campesinos, granjeros, y en general las personas habitantes de zonas rurales.

La vestimenta de los hombres se conoce como Lederhosen, y consta de un pantalón de cuero corto, acompañado generalmente por un chaleco o camisa de lino. Al ser hechos a mano, la duración es de por vida; se utilizaba este material porque era fácil de lavar y permitía mejor el trabajo en el campo.

Las mujeres utilizan un vestido llamado Dirndl o Dirndlgewand. Lo utilizaban las mujeres campesinas, después las sirvientas -que provenían del campo-, y curiosamente después lo comenzaron a usar las mujeres aristócratas como vestido de moda (lo mismo pasaría con el Lederhosen). El Dirndl consta de un vestido largo con un delantal, hecho de telas con bordados tradicionales.

Durante el Oktoberfest -iniciado este año el 19 de Septiembre- se ofrece comida, por lo general pollo, Bretzel (pan salado) y carne de buey, entre otros platillos. También se celebra en otros países como Brasil, Canadá y Chile; pero es como comparar el Spring Break de Cancún con el de Acapulco.

Por cierto, en 2010 se celebrará el bicentenario del Oktoberfest; aquí tendremos el bicentenario de nuestra independencia, pero no habrá mujeres en rebozo repartiendo pulque o tequila, sólo una reunión en el zócalo con gran número de elementos de seguridad para evitar revueltas (por aquello de que en el fin de la primera década de cada siglo -desde hace dos- hay levantamientos)

Yo, desde esta pequeña pero sobrepoblada ciudad, en un país separado de Alemania por el Océano Atlántico y unos cuantos países europeos, les deseo a todos los alemanes, alemanas y visitantes, unas felices borracheras. ¡Salúd! o mejor escrito, ¡Prost!
domingo, 20 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

Erase and Rewind

Bueno, aquí republico algunos escritos que me han pedido porque ya son viejos y por ello no aparecen en la página principal. No es por falta de tema, aún tengo algunos pendientes pero los publicaré despues.

¿Soy o me parezco?


Podía observar que otro universo, similar pero inverso, podía verse a través del espejo. Intentaba traspasar esa barrera, mirar lo que mis ojos no me permitían, saber si había algo diferente a mi realidad. No podía. Simplemente me limitaba a observar.

Corriendo, fui a buscar un espejo al baño, que quedaba cerca del cuarto. Lo puse a mis espaldas. El efecto óptico me hacía cuestionarme cuántos reflejos podía distinguir. ¿Por qué hay tantos dedos sujetando un marco con relleno invisible? ¿Qué pensará ese tipo idéntico a mí? ¿Qué pasa si de pronto, deja de tener los mismos movimientos que yo, dejar de ser un simple reflejo?

Quizá yo sea un reflejo de la misma sociedad con la que diariamente me identifico, platico, río, lloro. Tal vez, y sin darme cuenta, adopto las cualidades y defectos de las personas cercanas a mí. Puede ser que nadie sea original, y todos seamos una copia de la fotocopia, al grado que ya no se distinga su contenido.

Si no, ¿Cómo aprendimos a hablar? ¿Cómo es que tenemos preferencias por uno u otro color? ¿Por tal corriente o género musical? No niego que, en base a la fidelidad de los valores que hemos aprendido desde pequeños, es lo más cercano que podemos estar a la identidad propia. Pero de eso a que alguien pueda argumentar que es 100% original en su estilo, dista mucho de la realidad.

También el entorno y las circunstancias definirán nuestro carácter. Si se cuenta con un ambiente tranquilo, generalmente la persona será más seria; si por el contrario, la situación es inversa, gustará de salir mucho a fiestas o será enojón, irritable, etc.
Las actuales tribus urbanas son el claro ejemplo a lo que me refiero. Los punketos, darketos, skaters, emos, y demás identidades populares juveniles sobre todo, comparten características en común. Por lo tanto, si se cuenta con dichos calificativos físicos, ¿Cómo pretende uno de ellos, anunciarse “original”? ¿Y los demás son piratas, o cómo?

“Es que yo soy único, no me parezco a los demás” escuchaba decir a un sujeto de no más de 19 años, seguro de sí mismo y de sus palabras. “Pues tienes dos ojos, una nariz y dos manos, igual que el resto de tus congéneres”, pensé dentro de mí. Intenté interpretar su idea mal expresada. Quizá se refería a que pocas personas comparten la misma opinión acerca de la vida o de otro tema. No se identifica con cierto sector social y ha encontrado una idea común con otro grupo de jóvenes con apariencia física poco común. Y si no era eso lo que intentaba decir, lo ignoro.

Me encuentro de frente al espejo, y veo al estereotipo de mí, Mirándome fijo a los ojos. Seguía mis movimientos con una precisión incalculable (o al menos, con una diferencia imperceptible) y deducía al momento “No puedo ser original. Al menos, soy una copia de ése que se encuentra frente a mí, que sostiene un espejo en su nuca e intenta buscar una diferencia en mi universo”

Del amor y otros efectos psicotrópicos


El amor es una droga, y eso me queda más que claro. Las primeras veces te hace sentir en otro mundo, te hace volar, alejarte de la realidad y pensar solamente en lo bien que te sientes bajo su efecto. Pierdes la noción del tiempo y el espacio, y deseas ese sentimiento para toda tu vida. Una vez que el efecto termina, sientes una resaca sentimental, y deseas tener más, conseguirlo a toda costa y con quien sea.

Crea una adicción que es difícil dejar. Una vez que el proceso de desintoxicación comienza, se sienten unas ganas poco sutiles de inyectarte una dosis de amor; pocos son los que en verdad su fuerza de voluntad los mantiene limpios. Si se recae, se atasca de compasión amorosa, llegando a la cursilería e incluso a la desesperación de perder su cantidad necesaria y hacer cualquier cosa por obtenerla (llegando a la humillación, en cualquiera de los casos).

Muchos, para poder superarlo, requieren a especialistas que les brindan terapias, las cuales les ayudarán a irlo dejando poco a poco. Muchos, gracias al poder de la sugestión psicológica, consiguen auto-convencerse de que no lo necesitas, gracias a las pláticas del galeno correspondiente. La enfermedad, de sumergirte más en ella, se va agravando, y de no controlar su consumo (sobredosis), puede provocar la dependencia crónica (para siempre) o la muerte (sí, hay personas que “mueren” de amor, aunque bajo otros términos).

¿Qué si a mí me gusta drogarme? Por supuesto que todos hemos caído en la tentación de probarla alguna vez, por curiosidad, “para que no me cuenten”. La verdad es que es muy placentera, pero sé las consecuencias que ocasiona. Y así como una persona sana respeta su cuerpo, yo respeto (o al menos trato de hacerlo…) mi espíritu y mi estabilidad emocional.

Y así como las drogas causan deterioro físico, igual el amor causa deterioro y secuelas emocionales. Cuántos no pueden vivir sin una pareja, sin recibir mimos y besos empalagosos, sin alguien con quién caminar sujetado de la mano, y que a menudo tienen depresiones por la falta de todo lo mencionado.

Es un riesgo; es apostar todo, teniendo poco para ganar. Leía hace un par de días, en un portal de Internet, un pequeño reportaje o una gran nota informativa, por llamarlo de alguna manera, acerca de que la tendencia de los hombres a vivir en soltería aumenta en la actualidad. No me parece ilógico, señalando las amplias ventajas que representa este estado: No se cuenta con un compromiso, por lo que permite salir con distintas personas, llegar a la hora de nuestra preferencia, evitar gastos innecesarios, no soportar dramatizaciones y desgastes innecesarios, mayor administración del tiempo…

En fin, no digo que el amor sea malo, pero hay que tomarlo con la madurez y la mejor filosofía personal posible. Aprender a estar estable permitirá una mejor calidad de vida y una mejor relación con las demás personas. Es bueno experimentar, pero ¡NO TE CLAVES!, recuerda, Di no a las drogas (y si te drogas, pues móchate…)

Carta en respuesta al amante de la soledad


Me doy cuenta de su atracción por la soledad, en su clara comparación con una mujer. Pero tenga en cuenta, querido amigo, que la atracción, después de un tiempo, comienza a mostrar su verdadero rostro, embelecido por el placer de no ser molestado por unas horas.

Pero la soledad es más que despertarse a las tres de la mañana y no saber dónde está el baño. Usted no es la soledad, querido amigo. La soledad es ser despertado a cualquier hora, por el eco de su voz interior. Eco producido por las paredes vacías, huecas de un alma solitaria. Con un alto grado de depresión. Es hablar en voz alta sin darse cuenta, y no tener alguien que le responda. Es ver sólo sombras, no los cuerpos. Es ver fantasmas, no la realidad. Es no tener una pierna para sostenerse, un brazo para sujetarse, una cabeza para pensar. Haber extinto las lágrimas en tus ojos, por no tener un hombro en el cual llorar.

Es estirar los brazos sólo al despertar, es besar tu almohada y platicarle al viento. Es compartir tus penas, tus ideas, tus pensamientos, tus planes, con el cenicero y el vaso. Es el sentimiento del cual intentamos escapar hablando de lo que sea con una persona, cantando una canción en el automóvil o componiendo una canción, bebiendo alcohol o bailando en un antro los fines de semana.

Es sentirte ajeno al mundo, es sentirte ajeno a tu propio cuerpo. Es gritarle a Dios y ser ignorado por el eco. Es aquel escalofrío que tintinea en cada vértebra, y que al llegar a la cabeza, recuerdas que sólo se escucha el débil latir del corazón.
La soledad, querido amigo, es un laberinto en el que un alma se pierde y consume lenta y agónicamente, sin remedio, pensando que cada charla, cada gesto amable es tan sólo una vuelta a la izquierda, de esa trampa sin salida. Es ir por la vida sin la venda en los ojos, que todo el presente te recuerde el pasado.

La soledad es enfrentarse solo contra el tiempo y el espacio, en una carrera sin relevos, sin competidores, sin reglas, sin jueces, sin camino, sin meta...
La soledad, querido amigo, es por la cual muchos se sienten atraídos, pocos realmente conocemos, para nada nos enamoramos de ella.

Enamorarse de la soledad es la mujer que se enamora de aquel que la golpea para sentirle superior, esperando su arrepentimiento para escuchar las súplicas angustiadas y evitar el abandono.

Enamorarse de la soledad es una patología peor que el sadomasoquismo.

Solo enfermo, se puede uno enamorar de la soledad.
jueves, 17 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

Rumbo a la unificación mundial


No se trata de un mensaje positivo de paz de algún presidente, ni una frase choteada de algún político que quiera lucirse ante algún público desconcertado, mucho menos se trata de una página de internet que intente comunicar a todos los habitantes del planeta... se trata de una futura realidad económica-política, la punta de lo que llamamos globalización (que sería la driza), el fin de las causas.

Varias lenguas, muchos continentes, vastas costumbres, todo homogeneizado. Cientos de millones de personas, culturas, religiones, rasgos. Un poder. Una política basada en un régimen sin opositores, mas que ideológicos. Una extensión de tierra apenas dividida por lo que entonces parecerán lagos, donde el ganador será el dueño exclusivo de un poder sin fragmentos, apenas diminutas grietas. Y algun día, todo eso será suyo. ¿Y el satélite natural, apá?

Así es; la Unión Europea comenzó a gestarse tiempo antes de que se anunciara. Sería una exageración inapropiada e irresponsable asegurar que comenzó desde fin de la Segunda Guerra Mundial, pero es cierto que desde entonces, con la Declaración Schumman, ya se preparaba una administración conjunta de ciertos bienes (para entonces, el carbón y el acero).

¿Aquí? Quizá les suene el TLCAN, o Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Dicho proyecto se conocería oficialmente en los 90; con mayor exactitud, en 1994. Si bien los miembros de la UE tardaron más de 40 años para unificar al Continente Europeo, es cierto que el gran avance de la globalización (eje de este fenómeno) permitirá hacerlo en un menor tiempo posible.

Cuidado con afirmar que no tiene algo que ver, porque hay circulando un vídeo de Hal Turner (hará casi un año que lo ví, aproximadamente), en donde explica que el Amero sustituirá a nuestras devaluadas monedas -Dolares estadunidense y canadiense, y el Peso mexicano-. La actual crisis se ha elevado de forma descomunal, mientras el Euro (moneda de la Unión Europea) se comporta más estable. La fusión de las economías de América del Norte puede representar una mayor estabilidad.

Unión Europea = Euro Unión Americana = Amero

Si la secuencia lleva lógica, puede ocurrir con los demás continentes, y resultar cinco naciones, los cinco ingredientes de los cuales una posible fusión termine el pastel: La unificación mundial.

No quiero imaginar a qué sabrá.
miércoles, 16 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

La búsqueda del ingrediente X (para la página de videos superpoderosa)



Youtube ha demostrado liderar, al menos por el momento, una de las páginas de internet en la que los usuarios pueden buscar cualquier tipo de videos: musicales, documentales, comerciales; en fin, casi cualquier audiovisual que pueda existir en el mundo, debido a la libertad brindada a cualquier usuario registrado para subir este tipo de documentos.

Pero un fenómeno ha ocurrido y acontece, desde hace unos meses hasta la actualidad: Desde que Google compró Youtube (fenómeno acerca del cual después escribiré), se ha generado una paranoia con respecto a los derechos de autor acerca del contenido de los videos que se suben a la red, es decir, se ha cancelado gran parte de audio en los visuales -después del proceso-.

Una caza de brujas se ha manifestado desde entonces. recuerdo que me gusta mucho la secuencia de video de "Bachelorette", de la artista islandesa Bjork. Cierto día, buscaba el mismo video, encontrando con desagrado que el audio de casi todos los videos relacionados con la canción fue eliminado. Sólo encontraba representaciones en vivo de la cantante o covers de fanáticos.

La siguiente medida puede ser la incógnita clave de tal movimiento: ¿Es eso benéfico o contraproducente? Seamos sinceros: millones de usuarios entramos a la página para encontrar rarezas, recordar canciones nostálgicas y un vasto etcétera. Después de la decepción, intenté subir un par de videos, con un resultado frustrante: el audio de tales videos fueron cancelados. Acto seguido: busqué otra página para hacerlo; y busco videos en otros sitios donde en youtube ocurre la misma situación.

A los brillantes en los negocios parece habérseles fundido las bombillas. Hay otras maneras de solucionar esos problemas, sin afectar a los derechos de autor; se me ocurren algunas: editar aquellos audios que contengan el contenido total de una canción, ya sea "pisando" la canción con algún ID sonoro de Youtube o Google (es decir, tomar un pedazo de canción e insertar una voz promocional de la página), quizá cortar la canción algunos segundos, etc.; Poner un sello de agua en aquellos visuales en los que se transmita algún programa no autorizado; incluir a los patrocinadores correspondientes; no sé, estoy hablando con soluciones quzá no sólidas como el acero, pero no tan apartadas de la realidad.

Cada empresario tiene (o debe tener) una meta bien trazada, pero tal parece que aquí está fallando. Y si no se encuentra el ingrediente necesario para que esta pócima funcione, la fórmula habrá sido un fracaso, y terminaremos acudiendo a otras páginas; pero las soluciones llegan con las presiones. A ver si no se aplasta primero.
sábado, 12 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

¿A segunda vuelta?


Diez para aquellos niños que aparecen en el programa de "Todo el mundo cree que sabe", que quizá no son los grandes estudiantes con gran conocimiento de primaria, ni los futuros genios que México espera impaciente; pero tienen el mérito de dominar temas básicos en un país en el que la educación es un sector muy descuidado. Quizá las respuestas ya estén predispuestas y estudiadas por ellos, pero la imagen del niño inteligente puede servir como estímulo para sus contemporáneos.

Cinco para los "especialistas" con alguna profesión o en nivel superior, que van a demostrar la ignorancia que corroe la erosionada "erudición" recibida durante su rol de estudiante a través de su vida. Y es que no se molestaron en solidificar las enseñanzas aprendidas. Pero aún faltan dos boletas.

Cero para los responsables de este enorme hueco -o abismo-, las instituciones -en este caso, la S.E.P.- encargadas de inspeccionar que los temarios se cumplan de principio a fin y que los métodos de los maestros sean los adecuados, entre otras muchas deficiencias que provocan estos resultados.

A recursamiento directo la SNTE y ni qué decir de la maestra; que se regrese a kinder. El sindicato es el encargado de promover este programa; no puede atender correctamente los asuntos internos, pero busca camorra y dinero por doquier. Entre Hummers para cada líder y plantones, intentan promover una educación ejemplar con sus "comerciales" a la mitad del programa. Y lo que es peor, se jactan de defender "su" proyecto, alianza por la calidad de la educación, cuando es la SEP la encargada de su desarrollo; el SNTE, de vigilar el cumplimiento de los derechos de los maestros. Dando palmadas y clavando la estaca.

Regresando al contenido del programa, lo mejor de todo es ver a aquellos "eruditos" sosteniendo ante una camara, representando miles -si no millones- de personas observándola y escuchándola:
-Soy Escriba su nombre aquí , y un niño de primaria sabe más que yo. ¡Porque eso nos encanta, y no nos da pena! Si potencias mundiales como Japón se burlan de la gente con programas humillantes, ¿Por qué nosotros no, aunque sea un poquito?

Mención especial merece Marco Antonio Regil, conductor del programa, quien es un sujeto con carisma, además agrega comentarios graciosos atinados. En fin, a pesar de esos elementos, por algún factor extraño los programas basados en esta dinámica tiende a desaparecer, con excepción de "El rival más fuerte". Veremos cuánto tiempo soporta la presión del ranking, que ha destripado a más de uno.
jueves, 10 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

Del diezmo a los aviones (chorototooooote)


No es que quiera decir que lo del secuestro del avión de Aeroméxico haya sido una treta, pero parece ser el pretexto perfecto para distraer un poco a la sociedad, y coser unos cuantos parches a la ya deshilachada economía mexicana. Obviamente, mientras no afecte a la tela de los "big bosses".

Pero ya es otro kilo más en la joroba. México está sufriendo en verdad la actual crisis económica (¿Y el remedio para el catarrito?) después de los consecuentes préstamos del Banco Mundial y del Fondo Monetario "Infernacional" por la crisis de la "influencia AHLNL" (gracias de nuevo, Elba). ¿Habrá lugar en el cinturón para hacerle otro agujero más? apretarlo siempre ha sido la solución.

Ahora el sector entre ojos es el de los cigarros, alcohol -maldita sea- y telecomunicaciónes; internet incluído. México tiene las tarifas más altas en telefonía (empresa propiedad de Carlos Slim, para no extrañarnos), además de dominar claramente el mercado de las empresas de servicios para celulares con Telcel, aplastando a rivales como Movistar -entiéndase monopolio-.

¿No resulta curioso que el coloso nunca es afectado? La crisis agudiza, Slim aumenta precios, gracias a sus cuates.

Sin embargo, me parece acertada la proposiciòn de la Cepal (Comisión Económica Para América Latina y El Caribe); a cobrarle más a los que tienes más. ¿Por qué no? Siempre terminamos pagando los platos rotos. Impuestos para las pequeñas y medianas empresas, operativos opresores... ¿Por qué no? Porque los que más tienen, más quieren.

¿Que con el impuesto a la telefonía no se afecta a los pobres? Los pobres sufren de una o más carencias de necesidades básicas, no usan el teléfono y mucho menos internet.

¿Que la mitad del gasto en telecomunicaciones lo realiza el 20% de los hogares más ricos? Es muy burda esa explicación. ¿Hasta dónde se considera "muy rico" un hogar? Las familias más ricas para mí son 20 (Slim, Aramburuzavala, etc.) y, ¿cuántas familias existen entre la pobreza y estos 20 pilares económicos?

¿Que este impuesto se aplica en todo el mundo, y es más alto en países como Estados Unidos y Turquía? Hay una diferencia: nosotros somos un país de tercer mundo "en vías de desarrollo" (lo último, en teoría). Afortunadamente, no resultó tan salvaje como en El Salvador el año pasado, pero no tuvo por qué ocurrir, hay otras medidas.

Citando a Jorge Máttar, director adjunto de la sede subregional de la Cepal en México, "que las personas y empresas que ganen más, también paguen más impuestos o evitar que las grandes compañías utilicen exenciones o la legislación fiscal para pagar montos muy pequeños". Buena propuesta, aunque utópica. Los ricos quieren pagar menos y cobrar más.

¿Y ahora vienen con que un "pastor" secuestra un avión, mostrando en la televisión abierta una cobertura especial del incidente? Quizá el tal pastor es un peón distractor, con ayuda de los Medios Masivos de Comunicación, para que la reina haga el jaque mate. Que Dios lo perdone.
lunes, 7 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

Carro que se duerme, se lo lleva la corriente


Vaya casualidad.

Pareciera que Dios decidió hacer un pequeño hueco en su abarrotada agenda, para visitar mi blog. Y es que quiso demostrarme dos situaciones: uno, la inutilidad en los proyectos del Gobierno del Distrito Federal (GDF) para prevenir -o, en su caso, solucionar si ocurren- emergencias; dos, que nos quejamos ante la ausencia o el exceso. ¿Quién nos entiende?

Dos horas y mucha suerte fueron necesarias anoche para llegar a un destino en el que, en condiciones óptimas, el transcurso dura de 20 a 30 minutos. Digo mucha suerte, porque literalmente cruzábamos (los demás automovilistas y yo) ríos de casi un metro. Varios automóviles quedaron a la deriva en una zona, con su automóvil apagado por el agua; yo sólo pedía al santo de mi devoción llegar a mi casa sin contratiempos mayores.

Era un laberinto de asfalto; la entrada a Viaducto estaba cerrado, Churubusco estaba lleno. Después de varias adivinanzas, llegué. Pero muchas personas no cantaron el mismo verso; cierto número de horas después, aún no podían destapar las coladeras, y eso que se destinaron 45 mil millones de pesos por parte de la Conagua para planear y llevar a cabo programas de abastecimiento de agua potable, mejoramiento de alcantarillado y saneamiento.

Doble jalón de orejas para Ebrard; él es el encargado de monitorear que esta planificacióin se estructure en resultados favorables, que cumplan su objetivo. Para la otra el cinturón espera su turno (y no precisamente para apretarse, el uso que le da Calderón).

Muy mal, muchachito, muy mal....
domingo, 6 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

¡Aguas con las aguas!

Hace algunas semanas, y como de costumbre, esperaba que el agua caliente evaporara el cansancio de vivir en una ciudad tan ajetreada como lo es el Distrito Federal. Pero cuán grande sería mi sorpresa al observar sólo un par de gotas resbalar por la regadera, mientras el grifo estaba completamente abierto

Y es que recientemente la mayoría de personas que habitamos en la zona metropolitana de la Ciudad de México hemos sufrido, además de la crisis económica, la crisis en el abastecimiento de agua. Una necesidad tan básica se ve insatisfecha en su totalidad, y ni las colonias "fresas" se salvan. Al parejo se han hecho recortes en el consumo del líquido vital en un porcentaje considerable (hasta en un 30%).

Marcelo Ebrard, en conferencia de prensa, anuncia que es una situación que no se había presentado, por lo menos en los últimos 40 años.

¡¡Eso es obvio, Don Ebrard!! Si tan solo en 30 años se ha duplicado la población en el centro del país: en el Distrito Federal, en 8 millones ; ahora, en la Zona Metropolitana (16 delegaciones y 34 municipios de edomex.), somos 18 millones.

¿El problema es que no hay agua? No. El problema es que no se han llevado a cabo estrategias planificadoras correctas. Hemos visto (o que alguien me desmienta) una inmensa construcción de edificios habitacionales, a pesar de la sobrepoblación; ello, por supuesto, implica una multiplicación en el consumo de agua.

Sumando a ello el cambio climático antropogénico -Si. Nosotros, y nadie más, somos los culpables de estos fenómenos naturales-, que provoca que las lluvias sean irregulares, es obvio, le repito a Ebrard, que ocurra esto. ¿Por qué se sorprende? ¿La noticia le cayò como agua helada, o què?
jueves, 3 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

Maestra de lingüística

Me extraña que siendo araña, no sepa tejer telarañas...

Después de varias veces de ver el video que editó IJS News (supongo), y reir en cada error de la "Maestra" Elba Esther Gordillo -quien anteriormente dio muestras de sinceridad o descaro, al aceptar de manera indirecta que "si no recibiera ingresos, no tendría muchas cosas que posee en la actualidad"- me vino la tristeza de la realidad.

Y es que la lideresa (curiosamente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación) ha dado muestra de su ineptitud, tanto para coordinar de manera correcta la inconformidad de los profesores a quienes dirige, como para poder pronunciar correctamente un discurso; no me refiero a un error mínimo.

No me extraña. Y creo que éso es lo grave del asunto, que nos estamos acostumbrando a una política liderada por personas incompetentes que parecen no haber cursado el mínimo grado de estudios; una política de mediocridad en la que ni un discurso LEIDO puede interpretarse oralmente de manera adecuada.

Curiosamente, parecen llegar al poder las personas menos capaces de asumir un puesto sobresaliente; literatos e intelectuales realizan papeles secundarios, y personajes como Ana Guevara llegan a ocupar gran rating en el escenario de la política; no la juzgo como persona, sino como delegada para asumir la responsabilidad en una delegación.

No es raro, entonces, que sujetos como "Juanito" lleguen a disputar (y ganar) una vacante similar, como ocurre con Iztapalapa; no es culpa de ellos, sino de las personas que abren estos espacios como si fuera la entrada a una función de teatro, y creen que ser parte de algún organismo de gobierno es como en una construcción de inmuebles: no importa si queda mal la estructura, de todas formas, tarde o temprano, se va a demoler.

Pero ya basta de latigazos; a reir, que es mejor que llorar.


martes, 1 de septiembre de 2009 | By: El Nazareno

Control descontrolado


Pensaba, mientras el tintineo del foco en el techo se desvanecía de golpe, en lo aburrido del mundo sin la tecnología, sin la televisión decorando el silencio con alguna novela sin chiste o la computadora reproduciendo un video de youtube. 20 minutos fueron más que suficientes para darme cuenta de lo tristemente rudimentaria que sería la vida sin la electricidad, sin las máquinas que nos hacen -curiosamente- el día más corto.

Decidimos pasar la vida de manera fugaz, sin saber el por qué; preferimos no averiguarlo, porque de encontrar la respuesta, tal vez nos atemorice. Quizá pasamos del alba a la noche como si fuera el último día por el simple hecho de darle valor único a la prisa como respuesta a nuestra existencia. No nos detenemos a analizar el mundo porque desperdiciaríamos el tiempo pensando en ello, cuando creemos que "andar a las carreras" es nuestra razón de estancia en la tierra; o peor aún, creemos que así se vuelve más productiva (a veces erróneamente).

Una especie de colapso invade la habitación, mientras me cuestiono acerca del control. ¿Qué es control? No es intimidar a los demás para crear respeto, tampoco la planificación económica (o de cualquier otra índole) a largo plazo, mucho menos se refiere al aparato que permite manipular a distancia la televisión. Todo eso se derrumba de un momento a otro: el día que el intimidado reacciona, cuando el jefe despide al empleado, en el momento en el que se va la luz y deja de funcionar el televisor.

El aburrimiento es el enemigo principal al que pretendemos vencer. Una lucha sin tregua en la que, para vencerlo, utilizamos todos los métodos -en ocasiones contraproducentes-. Pasamos la vida diseñando futuros inciertos o construyendo caminos sin salida, creyendo que tenemos el control absoluto de nuestro destino. ¿Cuál control?

Prendo un cigarrillo, quizá no por la necesidad de nicotina, sino para que el tiempo se haga más corto. El destello del cerillo alumbra macabramente el hueco entre mis manos, mientras la desprotección me cobija; desprotección creada por la falta de la tecnología. Justo cuando creíamos tener el control sobre la tecnología, caemos en el error. La tecnología tiene el control sobre nosotros; sin ella, nos reducimos a una masa amorfa e inútil.

De pronto, un flash me cegó, anunciándome el regreso de la electricidad. Mentalmente abrazo todos los electrodomésticos, comprendiendo una pequeña lección natural. Inmediatamente enciendo la televisión; cualquier canal es bueno. Mientras tomo el "control" remoto, apago el cigarro, medicina destructiva de la ansiedad inconsciente, sin siquiera fumarlo por completo.