¡Santa crisis, Batman!

Las divisas parecen haber perdido el control, como McCain al sentirse superado (al menos psicológicamente) por su rival político Barack Obama; el republicano sufrió el efecto de la aceleración de sus palabras con un par de palabras: "That one", refiriéndose al demócrata Obama, como "ése".
14 pesos el dólar, suena aterrador. Comercial Mexicana, empresa líder de autoservicios en el país, ha visto esta crisis reflejada en sus acciones, las cuales cayeron más que un hablador racista (léase párrafo anterior), hasta en un 82%, con un gran riesgo de declararse en bancarrota, imposible de pagar sus deudas.
Banxico, por su parte, ha tratado de frenar esta avalancha, "rematando" dólares (miles de millones). Y es que, de no encontrar una solución inmediata, y seguir con la filosofía Carsteniana de amor ciego a la moneda, arriesgamos una estabilidad que difícilmente se había conseguido. En Estados Unidos se vive pánico económico; tanto así que más de una docena (me refiero a miles de estadunidenses) realizan compras paranóicas, agotando la existencia de víveres en tiendas. Aquí, parece que ya nos acostumbramos a las crisis.
Y Calderón, bueno... pues propone nuevas medidas para impulsar al país, como un "plan B" energético, y una desregulación arancelaria, entre otras. ¿Realmente eficaz? mientras se queden en meras propuestas, no podemos afirmar nada. Pero sean peras o sean manzanas... Dice que no tendremos que "apretarnos el cinturón" de nuevo. Ojalá, porque el cinturón apretado deja marcas en la panza.
Pero como ciudadanos conscientes del problema, sí debemos de administrar mejor el dinero. No digo que restringirse al máximo, pero sí destinar los ingresos y egresos (ahí te dejo estos dos pesos; pagas la renta, el teléfono y la luz...).
¡Y ahora que ya se viene la Navidad! Ahora no habrá carritos ni regalos ostentosos, quién sabe si esta vez en verdad podamos tener una "Feliz Navidad". Sólo espero que tengamos para el pavo.
Yo, por lo pronto, hago lo de Diego Monroy, rector de la Basílica de Guadalupe, que ha decidido a los feligreses encomendarse a la "morenita del Tepeyac". Yo sí votaría por ella.

(Nota: El autor de este artículo se deslinda de toda responsabilidad de los efectos que pueda tener esta publicación. Échenle la culpa al gobierno)