sábado, 25 de octubre de 2008 | By: El Nazareno

Kada kien su varo

Ahora comprendo todo.

El jueves visité a un amigo que no veía hace mucho, y vimos una película que no había tenido la oportunidad de observar: 12 monos. Fue increíble ver la mancuerna del señor Bruce Willis con Brad Pitt, en una actuación increíble de ambos y una historia que puede parecer confusa, pero que al final te da los elementos para comprenderla. Una maravilla (por cierto, de 1995, y que les invito a ver).

Hoy me dispuse a ver la película de Kada kien su karma. Me es preciso mencionar que esta es la primera producción que distribuye en México Universal Pictures Internacional, además de que es un filme beneficiado (uno de los privilegiados) por el artículo 226 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta (LISR), que reza lo siguiente en su primer párrafo: “SE OTORGA UN ESTIMULO FISCAL A LOS CONTRIBUYENTES DEL IMPUESTO SOBRE LA RENTA, CONSISTENTE EN APLICAR UN CREDITO FISCAL EQUIVALENTE AL MONTO QUE, EN EL EJERCICIO FISCAL DE QUE SE TRATE, APORTEN A PROYECTOS DE INVERSION EN LA PRODUCCION CINEMATOGRAFICA NACIONAL, CONTRA EL IMPUESTO SOBRE LA RENTA O EL IMPUESTO AL ACTIVO QUE TENGAN A SU CARGO EN EL EJERCICIO EN EL QUE SE DETERMINE EL CREDITO. EN NINGUN CASO, EL ESTIMULO PODRA EXCEDER DEL 10% DEL IMPUESTO SOBRE LA RENTA A SU CARGO EN EL EJERCICIO INMEDIATO ANTERIOR AL DE SU APLICACION.” (http://info4.juridicas.unam.mx/ijure/fed/88/253.htm?s=).

¿Este tipo de cine es el que se desea apoyar?

Cuando se cuenta con el presupuesto, se desaprovecha, desde mi muy personal y humilde punto de vista (que quizá más de uno comparta), en historias simples, que no hacen partícipe al público. Simplemente se cuenta una historial lineal, con circunstancias graciosas y un desenlace adivinado.

Creo que estaba más atinado Gonzáles Inárritu o Alfonso Cuarón (y no son tipos increíblemente creativos, simplemente se metió la característica del realismo mágico de contar historias ligadas en fragmentos independientes, en el cine) en su manera de hacer séptimo arte. Sinceramente, me pareció un desperdicio.

Aunque de repente haya destellos de creatividad, como el joven Alonso Álvarez y su realización de “Historia de un letrero”, que por cierto, ganó en el festival de Cannes. (No nos meteremos en peleas inútiles de si es un plagio o no…) Desafortunadamente, a esos muchachos no se les otorga ese tipo de apoyo, y mientras sea así, se seguirá produciendo puro cine “palomero”. Ahora lo comprendo mejor...

De todas maneras, cada quien su varo.