miércoles, 13 de octubre de 2010 | By: El Nazareno

Falta de respeto

Diversos fenómenos extraños ocurren en un deporte relativamente nuevo: las artes marciales mixtas y más específicamente en la liga UFC.

Parece que este entretenimiento está más lleno de villamelones que la Plaza de Toros México, pues muchos no logran comprender la esencia de las artes marciales y la combinación de las distintas disciplinas; los alrededores del octágono se rodea de personas ajenas a la comprensión de lo que es en esencia la estructura del artista marcial. Cada evento de la UFC parece más un hato que espera el choque de dos toros en un encierro de Pamplona, que un público consciente de lo que las reglas y estrategias que las artes marciales mixtas conllevan. Imagino y comparo a estos sujetos con un público que espera que una partida de ajedrez se gane con dos movimientos o que un partido de fútbol termine con un marcador de 10-15.

Las artes marciales mixtas es precisamente eso: una batalla de estrategias bien aplicadas y que debe analizarse cómo se aplicará ante cada adversario, por ello debe existir un análisis de la especialidad del oponente y llevar a cabo el plan en el momento preciso; pero en esos momentos, la gente comienza a silbar atacando a los peleadores, sólo porque no se lanzan a los golpes a lo tonto, como ocurre en el peso completo.

Rara vez se observa al público japonés cometer este tipo de actos ignorantes en los eventos realizados en el país nipón, como el Pride FC. Ellos conocen a la perfección de lo que tratan las artes marciales y la disciplina que se requiere para practicarlas y para contemplarlas. Saben que un peleador atrabancado termina derrotado por alguna sumisión, por lo que cada combatiente debe escoger bien su manera de pelea y ello requiere paciencia y tiempo.

Por otra parte, el público inglés -influenciado quizá por la corporación de MMA americana- tiene como estandarte a Michael Bisping, quien aunque tiene un record más holgado que su compatriota Dan Hardy, no ha sido capaz de mostrarse contundente en dos divisiones: la media y la semicompleta. Sufrió tremendo knock out contra Dan Henderson y ante un desgastado -a partir de su salida de Pride- Wanderlei Silva, Bisping se mostró incapaz de detener a la bestia brasileña. Hardy, en cambio, soportó 5 rounds ante un Georges Saint-Pierre dominante absoluto en los pesos welter.

Curiosamente, Bisping peleará en el evento principal del próximo sábado ante un Yoshihiro Akiyama que debutó en la UFC con una muy disputada decisión a su favor y con una derrota ante Chris Leben, un no tan espectacular y no tan contundente peleador, pero que parece salvar el pellejo con esta victoria. Quizá la pelea entre Dan Hardy y Carlos Condit (que tiene un récrod más amplio que el mismo Bisping) pudo ser la pelea principal de la noche.

Tal parece, con todo lo anterior, que se le ha perdido el respeto a un deporte tan respetable.