lunes, 26 de octubre de 2009 | By: El Nazareno

"Como te ven, te tratan"


No haría mejor descripción del estereotipo prejuicioso, acerca de la imagen, el sujeto con el que adquirí un nuevo traje. Desconozco si ese señor, vistiendo elegantemente a diario, conozca el verdadero meollo de las palabras que pronunció. Gracias a ese tipo de prejuicios existe la discriminación, la marginación, la desocupación y otros fenómenos de la dicotomía imagen-economía.

No es algo que esté dentro de mis prioridades, pero una buena impresión siempre inspira confianza; por tanto, una impecable presentación asegura -muchas veces sobre el talento- mayores posibilidades de ocupar una vacante peleada. Es por ello que la vestimenta se vuelve un elemento cuasi indispensable en nuestro trabajo cotidiano.

Sin embargo, el observar una buena imagen en un espejo quizá tenga un efecto psicológico positivo, ello dependiendo de la persona. Cuando uno se encuentra en desorden, la pereza mental hace de las suyas, provocándonos reacciones pordebajo del porcentaje real al que haríamos nuestras actividades diarias.

Se convierte en un problema cuando se tiene la capacidad suficiente, pero un cuidado personal desarreglado (o al menos, no óptimo); y viceversa, se puede tener la mejor presentación física, pero una ineficiencia intelectual con respecto al puesto que se ocupará. Y en ambos casos, los resultados tienden a disminuir su eficacia y eficiencia -no siempre sinónimos-.

Claro que ambos elementos -imagen y capacidad- no tienden a chocar en todos los casos: claro que pueden combinarse ambas; entonces es cuando una persona es pieza que encaja en cualquier rompecabezas.

Sin embargo, es difícil, pues ambos aspectos requieren sendas manutenciónes: necesitamos tiempo para cortarnos las uñas, el pelo, escoger un traje, etc. Ello requiere gran conocimiento de la administración del tiempo (organización), lo cual no es tan sencillo como parece.

Lo correcto no es primero ver y despues tratar, sino lo contrario, sólo así podremos librarnos de tanto prejuicio que nos corroe las relaciones sociales a nuestro entorno. Ojalá.