sábado, 20 de octubre de 2012 | By: El Nazareno

Me alcanzó

La verdad apenas recuerdo mi primer celular, por aquella época de los noventa. 'El tabique' describía perfectamente a esa mancuerna que únicamente cumplía su objetivo: hacer llamadas y, con poco éxito en el afán de distraerme, jugar serpiente.

En ese tiempo también comenzaba a escribir, aunque no recuerdo bien cómo fue en realidad; prefería dibujar, pero nunca perfeccioné la técnica.

La primera computadora que tuve fue una vectra, con sistema operativo windows 93 (creo), exclusivamente para word y mahgong.

Llegó el internet y las horas en el cyber no cabían en el día. Fue una lucha intensa conseguir que mi computadora tuviera módem y abrir tres páginas web... en dos horas.

Conocí blogger. Ello me permitió escribir mis textos ya con forma y con imagen, para complementar la idea; todo esto le daba un toque menos amateur al escrito, pero necesitaba tiempo, estar en casa o en un cyber. Mientras, ya tenía un celular que reproducía vídeos.

La llegada de mi nueva familia ocupó con felicidad mi tiempo, y parecía momento de colgar la pluma virtual, pues el tiempo de trabajo es extenso y el tiempo libre es para mi hijo y mi pareja.

Y entonces me alcanzó. No me di cuenta, pero ya tenía un celular multifuncional (los teléfonos no son inteligentes) y entonces puedo escribir y editar y subir a la red... Sin una computadora, y ya puedo pasar tiempo con mi bebé y escribir. Una bendición que, gracias a Dios, me alcanzó.